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domingo, 30 de junio de 2024

Partido de fútbol


 

En el campo verde, bajo el sol brillante,
dos equipos listos, el ambiente vibrante.
El silbato suena, empieza la batalla,
cuerpos se entrelazan, la pelota estalla.

Los jugadores corren, sudor en la frente,
con destreza y fuerza, luchan vehemente.
El balón es rey, cambia de dueño,
en cada pase, un sueño pequeño.

Las gradas rugen, un mar de colores,
canticos y gritos, pasiones y amores.
Un gol es una fiesta, un momento eterno,
los brazos al cielo, un júbilo tierno.

El árbitro observa, sereno y atento,
sus ojos vigilantes, como el firmamento.
Tarjetas al aire, justicia en mano,
en este drama, él es soberano.

El tiempo avanza, el marcador incierto,
cada segundo cuenta, el esfuerzo es cierto.
Un último ataque, un disparo valiente,
la red se sacude, el estadio ardiente.

Finaliza el partido, el silbato resuena,
los cuerpos cansados, el alma serena.
Unos ríen, otros lloran, así es el destino,
en el fútbol, como en la vida, todo es divino.






viernes, 28 de junio de 2024

No dejes de soñar


 

En la quietud de la noche estrellada,

donde los susurros del viento resuenan,

hay un rincón de esperanza guardada,

un espacio donde los sueños despiertan.


No dejes que el miedo apague tu luz,

ni que la duda encadene tus alas.

Recuerda que en cada amanecer,

renace el brillo de todas tus ganas.


En el viaje incierto de la vida,

habrá tormentas que querrán hundirte,

pero en tu alma vive una fuerza escondida,

un faro que siempre puede iluminarte.


Sueña con mares de calma infinita,

con cielos pintados de mil colores,

con un mundo donde la risa invita

y las penas se disuelven en flores.


No dejes de soñar, aunque el camino

se vuelva oscuro y lleno de espinas.

Tus sueños son el mapa divino

que te guía hacia tierras divinas.


Que tus sueños sean como estrellas,

brillando aún en la noche más densa.

Que nunca muera esa llama en tu ser,

esa chispa que tu alma alimenta.


No dejes de soñar, porque en los sueños

se forja el destino que has de alcanzar.

En ellos vive el eco de tus anhelos,

la promesa de un futuro a crear.







jueves, 27 de junio de 2024

Vivir


 

Vivir es un constante navegar,

un viaje sin mapa, sin final,

es despertar con el sol en la piel,

y dormir bajo el manto estelar.


Vivir es sentir el viento en la cara,

correr descalzo sobre la arena,

es reír a carcajadas sin motivo,

y llorar en la lluvia serena.


Es descubrir nuevos horizontes,

abrazar lo desconocido sin miedo,

es aprender de cada tropiezo,

y celebrar cada pequeño enredo.


Vivir es amar con todo el alma,

dar sin esperar nada a cambio,

es encontrar la belleza en lo simple,

y en lo complicado, el encanto.


Es soñar despierto con los ojos abiertos,

crear mundos con solo un pensamiento,

es encontrar poesía en lo cotidiano,

y en el silencio, hallar el aliento.


Vivir es un arte, una danza sutil,

es caer y levantarse mil veces,

es un libro con páginas en blanco,

y en cada línea, nuevas luces y sombras.


miércoles, 26 de junio de 2024

Terraceando



En la terraza se extiende el día,
bajo el sol dorado, la calma brilla,
con el café humeante y la melodía,
de risas y murmullos en la orilla.

El viento suave acaricia las mejillas,
susurra secretos de antaño,
la ciudad a nuestros pies brilla,
un mosaico vivo en este instante urbano.

Las flores en macetas se mecen,
al compás de una brisa que embriaga,
el tiempo aquí, sin prisas, perece,
y en nuestros corazones se arraiga.

Los tejados rojos, las vidas cercanas,
historias que el sol pinta de ocres,
la tarde se adentra, y en las ventanas,
se asoman los sueños, los días que corren.

Terraceando, el mundo se detiene,
en este rincón de paz hallamos,
el refugio donde el alma se entretiene,
y la vida, en susurros, disfrutamos.

Las estrellas pronto vendrán,
a llenar de luz la noche serena,
y aquí estaremos, tú y yo, sin más afán,
terraceando, en un sueño que nos llena.






lunes, 24 de junio de 2024

Tarde de Piscina


 

Bajo el sol que acaricia la piel,

el agua brilla como espejo sereno,

risas y chapoteos llenan el aire,

la tarde se disuelve en un sueño ameno.


Sombrillas de colores pintan la escena,

mientras los niños juegan sin preocupación,

flotan en el agua como mariposas,

convirtiendo la piscina en su nación.


El calor del verano envuelve el ambiente,

los cuerpos se sumergen buscando frescura,

en cada brazada se siente la vida,

fluyendo en cada ola con ternura.


A la sombra, los mayores conversan,

historias contadas con un toque de nostalgia,

las horas pasan sin prisa ni agenda,

como si el tiempo aquí no tuviera presencia.


Un helado derritiéndose en la mano,

sabores que recuerdan a la infancia,

las nubes pintan figuras en el cielo,

la tarde de piscina se convierte en danza.


Y así, entre agua y sol, la vida se va,

en una armonía de simpleza y paz,

la tarde de piscina, efímera y eterna,

se queda en el alma, como un suave compás.







sábado, 22 de junio de 2024

Monte Gorbea



Monte Gorbea, al cielo erguido,
vigía de verdes valles,
en tu cumbre el viento ha nacido,
susurros y brisas suaves.

Roca y cielo se encuentran,
en tu cima de eterna paz,
donde las nubes se asientan,
y el horizonte se ve más allá.

Senderos que te abrazan,
cuentos de pasos antiguos,
leyendas que se entrelazan,
en la voz de tus abrigos.

La niebla besa tus laderas,
velos de misterio y calma,
y en tus noches de estrellas,
la luna te envuelve con su alma.

Monte Gorbea, guardián eterno,
de bosques y ríos cantarines,
tu esencia es un eco tierno,
en corazones peregrinos.

Oh, cumbre que toca el cielo,
refugio de almas inquietas,
en ti hallan consuelo,
las penas y las respuestas.

Monte de historias sagradas,
de caminantes y sueños,
tu presencia nos embriaga,
en silencios y pequeños ruegos.

Monte Gorbea, en ti se funde,
la tierra con lo divino,
y al pie de tu grandeza,
el hombre encuentra su destino.










 

viernes, 21 de junio de 2024

Música en el Corazón


 

En el vasto silencio del alma,
donde los sueños reposan en calma,
un susurro de notas se eleva,
como el murmullo de un río que anhela.

Melodías suaves, como el viento en la tarde,
acarician el pecho, su magia no arde.
Un acorde sincero, un latido, una flor,
es la música eterna, del profundo amor.

El violín susurra secretos antiguos,
el piano despliega susurros divinos,
cada cuerda y tecla, en sincera unión,
crean armonías que sanan la razón.

En la penumbra, una voz resuena,
canta historias de amor que nunca son ajenas.
Es el canto del alma, el latido vital,
que en cada compás, hace vibrar lo real.

El tambor marca el ritmo del corazón,
con cada golpe, una nueva emoción.
El eco en el pecho, resonancia pura,
es la vida misma, en su forma más dura.

Un arpegio de esperanza, una fuga de dolor,
en la sinfonía eterna, todo tiene su valor.
La música en el corazón, guía sin razón,
es el lenguaje del alma, la más dulce canción.

En cada nota, una historia escondida,
en cada pausa, una lágrima rendida.
La música nos envuelve, nos lleva sin control,
es el eco divino, de nuestro propio sol.

Así, en la vasta quietud del alma,
donde los sueños nunca se disuelven en calma,
la música reina, inmortal y sincera,
es el latido del corazón, la eterna primavera.






jueves, 20 de junio de 2024

Llegó el verano


 

El sol despierta, brillante y dorado,

un manto de luz sobre el campo sembrado.

Los días se alargan, las noches suspiran,

y el viento caliente susurra y conspira.


Risas de niños, jugando en la plaza,

corren descalzos, libertad en la brasa.

El mar se revuelca en olas de espuma,

la arena dorada, alfombra de pluma.


El verde se viste de tonos ardientes,

flores que estallan en matices rientes.

Los pájaros cantan su eterna canción,

el aire se llena de dulce pasión.


Helados que gotean en manos pequeñas,

refrescos burbujean en tardes risueñas.

Sombrillas se abren, paletas de color,

paisaje de ensueño, suspiro de amor.


El río murmura, secreto guardado,

entre risas y cantos, verano sagrado.

Los días se funden en horas de sol,

y el cielo despejado es un faro de rol.


Llegó el verano, festín de alegría,

donde cada instante es pura armonía.

Bailan los cuerpos, desnudos al viento,

y el corazón late en su propio momento.







miércoles, 19 de junio de 2024

Desde mi ventana


 

Desde mi ventana veo el mundo despertar,
las luces del alba teñir el cielo de coral,
el murmullo suave de un río cantar,
el susurro del viento, su eterna señal.

Veo rostros anónimos, historias sin contar,
la risa de los niños, la prisa sin parar,
las huellas en la arena que el mar va a borrar,
el vuelo de los pájaros que sueñan con llegar.

Las flores en el jardín se abren sin cesar,
sus colores vivos comienzan a brillar,
una danza de mariposas en el aire al azar,
el tiempo que se detiene, el momento a contemplar.

Desde mi ventana, el sol se eleva sin vacilar,
dando vida y calor a este día por comenzar,
las sombras se disipan, la noche va a descansar,
la esperanza renace con cada rayo de luz que va a brotar.

La ciudad despierta, su ritmo va a acelerar,
los ecos de la vida empiezan a resonar,
pero aquí, en mi ventana, me permito soñar,
con un mundo sin prisa, donde el alma puede volar.

Desde mi ventana, un refugio sin igual,
un rincón de calma en medio del vendaval,
un lugar donde el corazón puede hallar,
la paz y la belleza en lo cotidiano, sin igual.

Y así, cada mañana, en este rincón celestial,
observo y celebro la vida, su milagro tan vital,
porque desde mi ventana, con su vista sin par,
descubro la poesía en cada detalle, en cada despertar.






martes, 18 de junio de 2024

Silencio


 

En el vasto espacio del silencio,
donde las palabras no encuentran eco,
se ocultan los suspiros del viento,
y el alma halla su propio reflejo.

Es allí, en el reino de lo callado,
donde los pensamientos cobran vida,
donde el corazón, tan callado,
descubre la paz que anhela y ansía.

El silencio no es vacío, es plenitud,
es el abrazo de la calma infinita,
es el murmullo sutil de la quietud,
una melodía serena y bendita.

En la quietud de la noche estrellada,
donde el universo guarda su misterio,
el silencio susurra su balada,
y el alma se embriaga en su cautiverio.

Es en ese espacio sin palabras,
donde el amor habla en su lenguaje puro,
donde las heridas sanan sus llagas,
y el espíritu encuentra su rumbo seguro.

Así, en el silencio encuentro la verdad,
en su abrazo hallo consuelo y fortaleza,
es un refugio de pura serenidad,
donde florece la más profunda belleza.






domingo, 16 de junio de 2024

Caminando Sin Rumbo


 

Bajo el cielo sin fin, de estrellas bordado,
camino sin rumbo, mi alma a tu lado.
La noche murmura secretos de antaño,
el viento susurra, recuerdos de un año.

Senderos inciertos, caminos perdidos,
los pasos errantes, destinos huidos.
La luna me guía, testigo silente,
en esta odisea de andar por mi mente.

Las sombras se alargan, fantasmas del día,
susurros callados, ecos de mi vida.
El corazón late, constante y sincero,
en busca de sueños, en vuelo ligero.

Los árboles cantan su vieja balada,
de tiempos remotos, de historias pasadas.
Las hojas caídas, susurran al viento,
de amores perdidos, de eterno lamento.

Caminando sin rumbo, mi espíritu libre,
en busca de algo que nadie describe.
Tal vez en un giro, en un cruce perdido,
encuentre mi norte, mi anhelo escondido.

Así, paso a paso, sin prisa ni dueño,
exploro los mundos que alberga mi sueño.
Caminando sin rumbo, la vida me llama,
y en cada recodo, mi alma proclama.






sábado, 15 de junio de 2024

Sueño de viajar


 

En la quietud de la noche, cierro los ojos,
y en el horizonte de mis sueños me desplazo,
un viaje sin fronteras, sin reloj ni cronómetro,
tan solo con el deseo de volar, mi fiel abrazo.

Me envuelven paisajes de mares y montañas,
ciudades doradas bajo cielos estrellados,
senderos ocultos en antiguas cabañas,
y caminos de seda, en mis pensamientos trazados.

El viento me susurra secretos milenarios,
y en sus alas me lleva a reinos olvidados,
donde el sol acaricia campos legendarios,
y el alma encuentra refugio en versos encantados.

Recorro el bullicio de mercados orientales,
con colores y aromas que embriagan la razón,
y en un rincón perdido de bosques tropicales,
descubro el murmullo de una antigua canción.

Cada paso, un eco de libertad infinita,
cada paisaje, un lienzo de vida y emoción,
en el vasto teatro del mundo, me invita
a ser protagonista de mi propia narración.

No hay destino fijo, solo el viaje eterno,
la brújula apunta hacia mi propio anhelo,
y en cada nuevo amanecer me interno,
siguiendo el rastro de un sueño sincero.

Despierto con la certeza de que algún día,
mis pies tocarán esos suelos tan ansiados,
y en el corazón, la llama que todavía
mantiene vivo el deseo, jamás apagados.

Así, mi sueño de viajar permanece,
un faro que guía mis pasos en la niebla,
y en cada rincón del alma resplandece,
la promesa de un mundo que me espera.

viernes, 14 de junio de 2024

Melancolía nueva


 

En el rincón del alma, un susurro,
un eco distante de lo que fue,
se cuela entre las sombras, murmullo
de tiempos idos, de un ayer.

La melancolía danza en silencio,
tejiendo en su manto un nuevo sentir,
mezcla de recuerdos y anhelos,
de lo que no fue y lo que está por venir.

Es un nuevo amanecer que duele,
una luz que titila, temblorosa,
en el horizonte de lo incierto,
donde la esperanza es borrosa.

Las estrellas cuentan historias,
de amores perdidos, de sueños rotos,
y en cada parpadeo, la gloria
de lo efímero, de lo hermoso.

El corazón late con un ritmo
distinto, marcado por la ausencia,
y en cada compás, un abismo
de deseos y de penitencia.

Pero en esta melancolía nueva,
hay también un rayo de luz,
una promesa sutil que eleva,
un susurro de paz, un dulzor, una cruz.

Es el canto de la vida misma,
en su dualidad y misterio,
la tristeza que lleva la brisa,
y la alegría que surge del tedio.

En el ocaso de esta jornada,
la melancolía se disipa,
dejando una lección bien guardada,
en el corazón que aún palpita.

jueves, 13 de junio de 2024

Invitación


 

Ven, caminemos juntos bajo el sol naciente,
Donde el alba pinta el cielo con susurros de luz,
Deja atrás las sombras, el miedo y la mente,
Hoy, el mundo nos espera, sin prisa y sin cruz.

Tomemos la senda que la brisa acaricia,
Donde los sueños florecen, libres y radiantes,
Cada paso, un latido, cada mirada, una delicia,
Bajo el manto de estrellas, seremos caminantes.

Ven, bebamos del río que murmura secretos,
Sus aguas nos cuentan historias de antaño,
Entre risas y ecos, hallaremos amuletos,
Que guiarán nuestro viaje, sin afán ni daño.

Invito tu risa a bailar con la mía,
En un vals de esperanza, en un tango de fe,
Tus manos, mis manos, unidas en la armonía,
De este canto de vida, que juntos forjé.

Ven, celebremos la magia en cada aurora,
Donde el cielo se une con la tierra en un beso,
No hay más que este instante, no hay más que esta hora,
Acepta mi invitación, y en él hallaremos un universo.

miércoles, 12 de junio de 2024

El Reloj


 

En la quietud del cuarto sombrío,

susurra el tic-tac, latido eterno,

guardando secretos del tiempo frío,

en cada segundo, en cada invierno.


Su esfera dorada refleja el pasado,

instantes perdidos en su danza,

recuerdos grabados, jamás olvidados,

el eco de vidas, en su esperanza.


Manecillas que giran, siempre constantes,

en un círculo eterno, sin detenerse,

marcando momentos, breves, distantes,

en el río del tiempo, sin desvanecerse.


El reloj murmura historias calladas,

de risas y llantos, de amor y guerra,

en cada tic-tac, almas entrelazadas,

en el lienzo del tiempo, sobre la tierra.


Pero el reloj no llora, ni ríe, ni siente,

solo avanza, imparable, sin tregua,

ajeno a los sueños de la gente,

testigo mudo, de la vida y su entrega.


En su tic-tac hallamos la vida,

el comienzo y el fin, la despedida,

en su latido constante, la medida,

del tiempo que corre, sin ser detenida.


Reloj, guardián de lo efímero y eterno,

en tus manecillas, la danza del destino,

en tu tic-tac, el eco del invierno,

y en tu esfera, el alma del peregrino.







martes, 11 de junio de 2024

Nunca te dije


 

Hay un universo oculto,
en las palabras que no pronuncié,
donde mis sentimientos dormidos
te susurran lo que no alcancé a decir.

Nunca te conté del viento
que se lleva mi nostalgia
cuando pienso en tus ojos,
ni del mar de suspiros
que se ahogan en mi pecho
cada vez que no estás.

No te hablé de las estrellas
que conté solo para verte,
ni del sol que, envidioso,
iluminaba menos que tu sonrisa.

Guardé en silencio los miedos
que se esconden en la sombra
de no ser suficiente,
de no poder darte
todo lo que mereces.

No confesé mis sueños,
aquellos en los que caminamos
de la mano, sin prisas,
por un sendero de flores
que crecen de nuestra risa.

Callé los deseos,
esos que nacen en la soledad
de la noche,
donde el anhelo de tu abrazo
es la única melodía
que calma mi ser.

Nunca te dije que en cada despedida
una parte de mí se queda,
atrapada en la esperanza
del próximo encuentro,
esperando volver a sentir
la magia de estar a tu lado.

Hoy, estas palabras ocultas
flotan libres en el aire,
esperando que las recojas
y las guardes en tu corazón,
donde siempre han pertenecido.

lunes, 10 de junio de 2024

Jugando a ser feliz


 

En el jardín de los sueños,
donde el tiempo no existe,
jugamos a ser felices,
como niños sin cicatrices.

La risa es nuestro lenguaje,
las sonrisas, nuestras cartas,
y en cada esquina del paisaje,
la alegría nos desborda y atrapa.

Saltamos entre nubes de algodón,
dibujamos con los dedos el cielo,
cada suspiro es una canción,
y cada mirada, un consuelo.

Bailamos con el viento,
abrazamos la brisa suave,
en este juego sin lamento,
somos libres, sin más llave.

No hay sombras que nos asusten,
ni miedos que nos detengan,
el sol brilla y nos envuelve,
en este mundo que inventamos.

La vida es un carrusel de colores,
un torbellino de emociones,
jugamos a ser felices,
sin reglas, sin limitaciones.

Nos reímos del mañana,
abrazamos el presente,
en este juego eterno,
donde siempre somos valientes.

Porque al final del día,
cuando la luna empieza a brillar,
sabemos que en el alma mía,
jugando a ser feliz, aprendimos a amar.






domingo, 9 de junio de 2024

Día de votación


 

En el alba de promesas nuevas,
despierta la tierra en un canto,
bajo el sol que aún se asoma,
comienza el día del encanto.

Las calles se visten de esperanza,
con pasos firmes, voces que claman,
cada voto es una danza,
un futuro que se proclama.

En la fila, rostros diversos,
historias de lucha y sueños,
miradas de fe y anhelos,
unidos en un mismo empeño.

El papel, un susurro de cambio,
el lápiz, la llave del destino,
cada elección, un paso largo,
hacia el mañana que es divino.

Manos que temblorosas entregan,
la esencia de su voluntad,
corazones que sueñan y ruegan,
por justicia y por igualdad.

El día avanza, la luz se enciende,
en urnas de cristal y esperanza,
una nación que resurge y entiende,
el poder que en su voz se alcanza.

Y al caer la noche, el cielo escucha,
las plegarias y los gritos,
la elección es más que una lucha,
es el eco de nuestros ritos.

Día de elecciones, jornada sagrada,
donde el pueblo se vuelve voz,
en la unión de esta gran jornada,
se teje el mañana, juntos, los dos.






sábado, 8 de junio de 2024

Entre dos aguas



Entre dos aguas, mi alma navega,
un vaivén constante entre paz y tormenta,
en cada ola, un sueño que anega,
en cada brisa, una esperanza lenta.

La luna me guía, faro en la noche,
su luz serena, destello en la espuma,
y el mar murmura con dulce reproche,
secretos guardados en su bruma.

A un lado, la calma de la bahía,
donde el tiempo se detiene y descansa,
el eco suave de una melodía,
y el sol que en el horizonte se abalanza.

Al otro, la furia de olas bravas,
el viento que grita y arrastra penas,
relatos de barcos y almas esclavas,
y el cielo que en su llanto se desvena.

Entre dos aguas, mi corazón oscila,
buscando equilibrio en su desatino,
un paso al frente, y el miedo vacila,
pero la esperanza traza su camino.

Así transcurre mi viaje interno,
en esta danza de olas y mareas,
entre dos aguas, mi destino eterno,
donde el alma encuentra sus quimeras.






viernes, 7 de junio de 2024

Juventud


 

En los albores del alba dorada,
donde sueños se forjan, vibrantes, audaces,
corazones laten con fuerza desatada,
en la juventud, donde el tiempo se deshace.

Ríos de risas y mares de anhelos,
días que pasan sin prisas ni miedos,
alas que surcan los cielos sin frenos,
deseos ardientes, futuros sin credos.

El viento acaricia rostros curiosos,
miradas que buscan el mundo explorar,
aventuras surgen en campos frondosos,
nada es imposible, todo a conquistar.

Canciones resuenan en noches sin fin,
bailes de estrellas en cielos abiertos,
amigos que forman un fuerte confín,
promesas eternas en sueños despiertos.

La juventud es un fuego que arde,
una chispa eterna de eterna pasión,
es la vida misma en su más puro alarde,
un instante inmortal en cada corazón.

miércoles, 5 de junio de 2024

Paz en silencio


 

En el silencio del alba temprana,
cuando el sol despierta su manto dorado,
hay un susurro que el alma emana,
un murmullo de paz, un canto sagrado.

Las hojas danzan con el viento suave,
el río murmura su dulce canción,
y en mi pecho un latido que no cabe,
expresa un gozo, una liberación.

Cómo contar la paz que en mí florece,
si no hay palabras para describir
el amor que mi ser engrandece,
y la calma que me hace vivir.

Es un abrazo de la naturaleza,
un suspiro del cielo en mi ser,
un instante eterno de pureza,
que me envuelve y no quiero perder.

Es en la sonrisa de un niño,
en el murmullo del mar sereno,
donde encuentro el camino divino,
y en mi corazón, la paz que lleno.

Cómo contar esta paz tan plena,
que no se mide ni se compara,
es un regalo, una dicha amena,
que en mi alma se instala y se ampara.

No hay tormenta que esta paz consuma,
ni sombra que apague su luz,
es un faro en medio de la bruma,
es mi refugio, mi sol, mi cruz.

Entonces callo, dejo que el silencio hable,
que cada latido cuente mi sentir,
que la paz en su lenguaje amable,
se despliegue sin tener que mentir.

Así es como cuento la paz que siento,
sin palabras, sin ruido, en quietud,
dejando que el mundo sea el momento,
de vivir en la más pura plenitud.


martes, 4 de junio de 2024

La cigarra


Bajo el cielo azul y claro,
en el campo sin reparo,
cantaba siempre la cigarra,
alegre, sin un amparo.

Sus alas eran de cristal,
su voz, un eco celestial,
día tras día en melodía,
sin pensar en la agonía.

"¿Por qué cantas, cigarra amiga,
cuando la tarde aún nos abriga?"
le preguntaba el hormiguero,
trabajando sin desespero.

"La vida es breve y tan hermosa,
y esta tarde es tan gloriosa,
mi corazón canta en libertad,
sin pensar en la necesidad."

El sol se oculta, llega el frío,
el viento sopla con desvío,
la cigarra se halla sola,
en un campo que ahora inmola.

Los días grises la sorprenden,
sus fuerzas poco a poco pierden,
la melodía se ha silenciado,
y su canto, olvidado.

El hormiguero la contempla,
con su esfuerzo ella se enfrenta,
"Ven, cigarra, aquí hay lugar,
tu canto siempre supimos amar."

Aprendió la cigarra aquel invierno,
que la vida es un vaivén eterno,
donde el trabajo y el gozo van de la mano,
como el sol y la luna en el mismo llano.

Así, en la próxima primavera,
la cigarra cantó de nueva manera,
alternando su melodía y esfuerzo,
vivió una vida en justo consenso.

 

domingo, 2 de junio de 2024

Perro vagabundo


Por las calles sin nombre y las plazas vacías,
va el perro vagabundo, con su andar sin prisas.
Sus ojos reflejan noches sin abrigo,
buscando en las sombras algún amigo.

No lleva collar, ni hogar, ni dueño,
solo sueños rotos y un destino pequeño.
Su pelaje enmarañado, sucio, sin lustre,
esconde historias de lluvia y polvo en cada buste.

Se detiene a olfatear un rastro perdido,
quizás de un amor, quizás de un amigo.
Su hocico cansado, su corazón errante,
siempre en movimiento, nunca constante.

Entre los murmullos de la ciudad despierta,
él sigue su camino, en soledad, alerta.
Cada esquina es un nuevo desafío,
cada paso, un eco de su brío.

En las noches de luna, su silueta vaga,
una sombra solitaria que nunca se apaga.
Sus huellas se borran con el primer rocío,
pero su espíritu libre se alza bravío.

Oh, perro vagabundo, guardián de la noche,
que en tu andar errante llevas un broche
de libertad y tristeza, de fuerza y quebranto,
eres el testigo mudo del encanto.

Quizás un día encuentres lo que buscas,
un rincón cálido donde tus penas luzcas.
Hasta entonces, sigue tu andar sin rumbo,
perro vagabundo, señor del mundo.