Oscura la noche que vigila
senderos de nostalgia y de añoranza,
con la luna de plata que ilumina
al buho que no duerme y sí descansa.
Radiantes las estrellas danzarinas
bailando con el cántico del viento,
oleadas de hermosas golondrinas
nutriendo de belleza el firmamento.
Imagen nocturna tan divina,
fachada de misterios y confianza,
amor que se desprende cual neblina,
zurcido de pasión y de esperanza.