A ti, mi hermano querido
por quien tanto padecí´
Al igual que tantas veces, de ti siempre recibí.
Y aunque siempre te he tachado
de bohemio y vividor,
Jamás nadie ha conseguido, sacarte de mi corazón.
Tu sonrisa de estandarte,
Tu amor propio, luchador
Tu carácter tormentoso,
Tu corazón soñador.
Y aunque ya no compartimos
como antaño , la razón,
Siempre hermanos
Siempre unidos
Por la ley del corazón.
Y aunque pase mucho tiempo
y no consigo decir,
con palabras lo que siento.
Ni el tiempo, ni las personas
lograrán romper jamás
este lazo fraternal,
que siempre nos unirá.
Y cuando pasen los años
olvidarme no podrás
porque en mi pecho, hay algo tuyo
que siempre te pertenecerá.
Con todo mi amor . Carol.