Create your own banner at mybannermaker.com!

viernes, 7 de julio de 2023

Soledad


 

En la vastedad de la noche oscura,
se alza un eco sutil de soledad,
que envuelve el alma con su manto frío,
y a la tristeza invita a descansar.

En el silencio de la habitación vacía,
se escuchan susurros de melancolía,
un suspiro que se pierde en la nada,
mientras el corazón anhela compañía.

La soledad, amiga y enemiga a la vez,
nos sumerge en pensamientos profundos,
nos hace reflexionar sobre la existencia,
y encontrar en nosotros mismos el mundo.

En la quietud de la noche estrellada,
la soledad se convierte en poesía,
y en cada verso surge un destello,
de la belleza que habita en la melancolía.

Pero en la soledad también hay fuerza,
un espacio para el encuentro interior,
donde el alma se fortalece y crece,
y se descubren los tesoros del amor.

La soledad, a veces, nos lastima y duele,
nos hace sentir pequeños e indefensos,
pero también nos enseña a ser valientes,
a encontrar en nosotros mismos consuelo intenso.

Así, en los momentos de profunda soledad,
recordemos que somos dueños de nuestro ser,
y que en el abrazo del silencio y la calma,
podemos encontrar la paz y renacer.

La soledad no es un destino perpetuo,
sino un instante para reflexionar,
para luego volver a los brazos del mundo,
y con fuerza y alegría nuevamente brillar.

Entonces, abracemos la soledad cuando llegue,
y en su abrazo, encontremos la verdad,
pues solo desde la oscuridad más profunda,
podemos encontrar la luz de nuestra realidad.

jueves, 6 de julio de 2023

Recordando el Pasado


 

En el rincón de mi memoria, el pasado reposa,
susurra sus historias en cada sombra borrosa.
Allí, entre los recuerdos, mi mente se adentra,
reviviendo momentos que el tiempo ya enfrenta.

Recordando el pasado, la infancia vuelve a surgir,
con risas inocentes y sueños por cumplir.
Los juegos en el parque, las tardes sin fin,
el abrazo cálido de aquellos que ya no están aquí.

El primer amor se despierta en mi pecho,
suspiros adolescentes y un dulce despecho.
Las cartas escritas, palabras llenas de pasión,
en un baile de emociones sin razón.

La vida avanza y las lágrimas también,
las penas y desafíos nos hacen crecer.
Pero en cada cicatriz, un aprendizaje hallado,
y en cada derrota, un alma fortalecida en el pasado.

A veces, la melancolía invade mi ser,
anhelando momentos que no podré volver a tener.
Pero el pasado vive en cada latido del corazón,
construyendo el presente con sabia reflexión.

Recordando el pasado, encuentro mi identidad,
 vivencias y encuentros que se han hecho realidad.
Cada tropiezo, cada logro, cada camino andado,
son las piedras que construyen el ser recordado.

Así que guardo con cariño cada historia vivida,
los instantes que dieron forma a mi vida.
El pasado es un tesoro que guardo en mi ser,
un faro que ilumina mi presente y mi querer.

Porque aunque el tiempo avance y el pasado se desvanezca,
sus huellas en el alma siempre permanecerán frescas.
Recordando el pasado, encuentro mi esencia,
y sigo escribiendo la historia con gratitud y paciencia.